El vocal de la Sala Constitucional Primera de La Paz, Israel Campero, justificó la medida cautelar que emitió para que el congreso “arcista” del MAS tenga supervisión provisional del Órgano Electoral.
Aseveró que existió un “error de origen” del Órgano Electoral, que derivó en la actual situación del MAS, donde dos facciones se disputan la legitimidad para convocar a congreso partidario.
El “error” observado por la Sala Constitucional consiste en que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) no habría hecho cumplir una resolución de Amparo, emitido en diciembre de 2023, donde se ordenaba respetar el artículo 13 del Estatuto del MAS-IPSP.
Dicho artículo del Estatuto del MAS establece que el congreso se convoca por la Dirección Nacional del partido, previo consenso con las organizaciones sociales.
Los “evistas” aseguran que no les pueden obligar a consensuar con organizaciones “arcistas”, pero los afines al Gobierno aseguran tener la representación legítima de las organizaciones.
El vocal Campero, sin embargo, señaló que la propia Dirección del MAS, encabezada por Evo Morales, envió el año pasado notas con hojas membretadas a los dirigentes que ahora desconoce para convocarlos a reuniones. “Imagínense, semejante prueba”, acotó.
El error del TSE
Lamentó que ahora se vuelque la mirada hacia la Sala Constitucional, cuando la atención debería enfocarse en el Órgano Electoral por el error que habría cometido.
“El primer error y el error de origen lo cometió el Órgano Electoral. El Órgano Electoral es un órgano técnico, no es un conjunto de amigos que se reúnen para decidir una cuestión”, dijo Campero en entrevista con Erbol.
“Es absolutamente inaceptable que un Tribunal Supremo Electoral, al momento de autorizar o no una un congreso no advierta que dentro de la inscripción normativa existe una cláusula que es de difícil inobservancia”, agregó.
Pide seriedad
Campero consideró que el Órgano Electoral, en lugar de denunciar una injerencia, debería estar tomando actitudes de una verdadera autoridad.
Según Campero, el TSE cree que sus decisiones son en frío y no sabe el daño que le podría causar finalmente a un proceso natural de elección de una nueva directiva del MAS.
En el marco de este conflicto, el TSE ha rechazado avalar tanto las convocatorias a congresos de las dos alas del MAS.
El vocal constitucional criticó la actitud del TSE de, en lugar de asumir decisiones eficaces, limitarse a observar incumplimientos y llevar a “fojas cero” los trámites que recibió en este caso. Sugirió que el Órgano Electoral se pronuncie seriamente y evitar que sus errores tengan que ser resueltos por otro tribunal.
Al justificar la medida cautelar para que el TSE supervise el congreso “arcista”, Campero explicó que el error del Órgano Electoral no se puede cargar a los accionantes o terceros interesados.
Pero, de todas maneras, el vocal constitucional aclaró que para consolidar la supervisión, el congreso de El Alto tiene que cumplir los requisitos del Estatuto del MAS y las leyes respectivas, porque de los contrario también se retrotraería a “fojas cero”.